Nuestro objetivo no es recuperar o conseguir un óptimo estado nutricional, sino proporcionar bienestar y placer al paciente. Debemos señalar a la familia que no es preciso que el paciente terminal tome tantos alimentos como una persona sana, ya que tanto su actividad como sus necesidades han disminuido de una forma considerable. También debemos recordar que el paciente esta débil porque la enfermedad avanza, no por falta de alimentación....